Ovidio Robles P., asesino del sargento de la Policía, Oliver Ramiro Mendoza Orias, y tres de sus seis cómplices se declararon culpables y se enfrentan a condenas de 30 y 15 años de prisión. El uniformado de 29 años, fue abatido la madrugada del 4 de abril en la zona del Mirador del municipio de La Guardia, departamento de Santa Cruz.
Robles fue el que disparó en la cabeza al sargento Mendoza, según confirmó un informe pericial del Instituto de Investigación Técnico Científicas de la Universidad Policial (Iitcup).
“El Instituto de Investigación Técnico Científicas de la Policía realizó los exámenes para establecer la presencia de difenil amina sulfúrica en las manos de este ciudadano (Ovidio Robles) encontrando un resultado positivo en esta prueba”, informó el comandante general de la Policía Boliviana, Álvaro Álvarez.
Autoridades policiales presentaron, la pasada jornada, a los siete implicados en el asesinato del uniformado abatido cuando realizaba labores de vigilancia en busca de evitar hechos delictivos.
Según las investigaciones, Mendoza, junto a dos camaradas, se encontraba vigilando la zona del Mirador, desde un vehículo particular para no alertar a los posibles delincuentes que rondan el lugar, debido a que habían recibido desde el 24 de marzo denuncias de robos de vehículos y otras pertenencias y violaciones a mujeres.
Los antisociales, liderados por Ovidio, se acercaron al vehículo para presuntamente atracar a los ocupantes, pero al percatarse que se trataba de policías, el cabecilla abrió fuego en contra de Mendoza.
Los delincuentes huyeron al monte aprovechando la oscuridad, mientras Mendoza era auxiliado, pero no resistió y murió de camino al hospital.
Se desplegó un fuerte contingente policial para dar con los asesinos y, en menos de 24 horas, se logró aprehender al asesino y a sus cómplices, entre ellos dos mujeres.
El fiscal Departamental de Santa Cruz, Roger Mariaca, informó que Ovidio Robles, principal sindicado del asesinato del policía, y tres cómplices suyos aceptaron su culpa y suscribieron, de manera voluntaria, un acuerdo de procedimiento abreviado, por lo que el autor del crimen sería sentenciado a 30 años de cárcel, sin derecho a indulto, y sus colaboradores, Luis Yalmar R.R., Carlos Aurelio P.M. y Wilfredo P.M. recibirían 15 años de presidio.
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