Después de reinstalar el diálogo desde las 06:00 horas de este martes, el magisterio urbano de Bolivia, decidió romper el diálogo con autoridades del Ministerio de Educación y tras ser gasificados por la Policía, ratificaron el paro de 24 horas, con suspensión de actividades, para el viernes 24 de marzo.
“Por un tema de principio de solidaridad con nuestras bases, nos hemos retirado. Hemos roto el diálogo y nos estamos incorporando a nuestras bases como dirigentes. En ese marco, el magisterio urbano de Bolivia ratifica el paro 24 horas para el día viernes con suspensión de actividades, bloqueo de carreteras y cierre de fronteras a nivel nacional”, informó el dirigente Ludwig Salazar.
La movilización fue convocada desde la mañana y cuando intentaron pasar por las instalaciones del Ministerio de Educación, ubicada en la avenida Arce, se desataron incidentes con la Policía que impidió su paso haciendo uso de gases lacrimógenos.
Por otra parte, el secretario ejecutivo de la Confederación de Trabajadores de Educación Urbana de Bolivia (Cteub), Patricio Molina, confirmó la ruptura del diálogo en solidaridad por lo ocurrido con los profesores de base.
“Nosotros hemos venido dispuestos al diálogo pero lamentablemente se han abordado tres temas pero ninguno se ha podido avanzar. Es el mismo discurso de la anterior vez, los mismos planteamientos, los mismos tecnicismos y no hay una voluntad concreta, no hay una voluntad política para resolver el conflicto”, afirmó.
Señaló que la medida de presión vendrá acompañada con bloqueo de carreteras y cierre de fronteras.
El magisterio urbano inició sus movilizaciones hace tres semanas exigiendo la suspensión de la aplicación de los nuevos contenidos de la malla curricular, un congreso de la educación, mayor presupuesto para el sector, ítems de nueva creación y atención al déficit histórico, entre otros temas.
La mañana de este martes, se reinstaló el diálogo por tiempo y material para tratar tres de las cinco demandas prioritarias que tiene el sector.
En el encuentro, participaron el ministro de Educación, Edgar Pary, el viceministro de Educación Regular, Bartolomé Puma, y los dirigentes de las 31 federaciones que forman la Confederación de Trabajadores de la Educación Urbana de Bolivia.
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