Santa Cruz cumple este miércoles el quinto día de paro indefinido debido a la exigencia del Censo de Población y Vivienda el 2023. A esta medida se suma el cerco que fue instalado por movimientos sociales quienes se oponen al paro que se inició el sábado por los ciudadanos cruceños, por determinación del Cabildo del 30 de septiembre.
El domingo reciente, los campesinos dieron un plazo de 48 horas para que se levante el paro indefinido en la capital oriental; sin embargo, como aquello no ocurrió la mañana del martes, comenzaron a interrumpir el tráfico en las carreteras.
Fue cerca de La Guardia, volquetas dejaron los montones de tierra para cercar al departamento cruceño, según reporte de Unitel.
Otro sector donde se instaló la medida de presión de los campesinos fue en Pailón. Se conoce también que la carretera a Camiri será interrumpida. Los campesinos indicaron que por estrategia no iban a brindar mayor información sobre los otros puntos donde iban a interrumpir el tráfico.
En la capital cruceña y en las provincias consideran que el cerco a Santa Cruz en lugar de perjudicar el paro indefinido, está reforzándolo.
En las cuatro primeras jornadas, se registraron enfrentamientos principalmente por las mañanas, entre quienes acatan el paro indefinido y quienes rechazan la medida de presión.
El martes precedente por la noche, en la zona de Clara Chuchío en Warnes, un grupo de personas que instaló un bloqueo denunció que fueron atacados por personas en motocicletas y que la Policía no actuó para evitar las agresiones.
Desde el Comité Cívico Pro Santa Cruz, el vicepresidente Fernando Larach reiteró que el paro continuará hasta que el Gobierno establezca la fecha del Censo, siempre y cuando se realice en 2023.
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