El bombardeo se registró en la región central ucraniana de Dnipropetrovsk durante la noche del martes; según el informe de la administración militar de la región, el saldo fue de 13 personas fallecidas y otras cinco heridas de gravedad.
Las localidades de Myrivska y Marhanets, en el distrito de Nikopol, fueron impactadas por al menos 80 misiles que cayeron en zonas residenciales, según información difundida por el Servicio Estatal de Emergencias de Ucrania.
El reporte de las autoridades detalló que más de 20 edificios, un centro cultural, dos escuelas, el edificio del ayuntamiento y varias otras infraestructuras administrativas sufrieron daños de consideración.
Miles de personas se quedaron sin electricidad en Marhanets, mientras que al menos otras mil en Myrivska están sin gas, según informó el jefe de la administración militar de la región, Valentyn Reznichenko.
Marhanets está ubicada en la orilla opuesta del río Dnipro, y es donde está emplazada la central nuclear ocupada de Zaporiyia.
Anteriormente desde Kiev acusaron a las fuerzas armadas rusas de almacenar armamento pesado y atacar desde la planta nuclear de Zaporiyia, que tomaron a principios de marzo. Por su parte, Moscú afirmó que este complejo es en realidad el objetivo de las tropas ucranianas.
El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, calificó como «suicidas» los disparos de artillería y cohetes en la zona recientemente afectada, lo que encendió las alarmas por un posible accidente nuclear, la más grande en Europa.
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