La diputada de Comunidad Ciudadana (CC), Luciana Campero denunció este lunes que la empresa CAMC, cuya gerente comercial fue Gabriela Zapata, expareja de Evo Morales y que pasó cuatro años en la cárcel por corrupción, elabora pliegos de especificaciones para contrataciones estatales.
En conferencia de prensa la legisladora tarijeña exigió que se investigue, por qué Zapata presuntamente continúa operando tras haber salido de la cárcel.
“Ustedes saben que Gabriela Zapata ha estado vinculada a esta empresa, CAMC, esta empresa china. Es muy raro que sale de la cárcel y nuevamente vemos participar a esta empresa en asuntos del país, en adjudicaciones del Estado”, denunció Campero.
Según la legisladora de oposición, hay corrupción y CAMC es una empresa que causó daño económico al Estado.
Antecedentes del caso
Zapata fue acusada de beneficiarse de millonarios contratos con el Estado, los que firmó cuando se presentó como gerente de la empresa china CAMC. La firma extranjera negó luego tener relación con la expareja de Evo Morales.
Fue aprehendida el 26 de febrero de 2016 y un juez la remitió al Centro de Orientación Femenina de Miraflores, en la ciudad de La Paz. Allí estaba cumpliendo su condena, fue liberada con libertad condicional en 2021 por el juez Cuarto de Ejecución Penal, Abraham Aguirre Romero.
Estaba sentenciada por los delitos de falsedad ideológica, uso de instrumento falsificado, contribuciones y ventajas ilegítimas, legitimación de ganancias ilícitas, uso indebido de bienes y servicios públicos, además de asociación delictuosa.
Este caso comenzó a inicios de 2016, cuando Zapata cobró notoriedad como expareja del expresidente Morales.
Ante estas versiones y en una declaración para la prensa, Morales declaró que tuvo un hijo con Zapata, pero que falleció poco después de nacer en 2007.
Luego, el líder del Movimiento Al Socialismo, quien en ese tiempo ejercía la presidencia del Estado, exteriorizó sus dudas sobre la existencia del menor e inició una investigación.
En mayo de 2016, una jueza señaló que no había prueba de la existencia del supuesto niño y decidió archivar la demanda de Morales, quien exigió a Zapata presentar al menor. La exnovia del político había señalado que el menor estaba con vida.
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