Varias personas particulares prefirieron quemar en vía pública varios productos alimenticios procedentes de Argentina, antes que entregarlos a los almacenes de la Aduana Nacional en Villazón, los hechos se registraron la jornada precedente.
La gente, a quienes se les impidió internar la mercancía, prendió fuego a los productos al frente de las oficinas aduaneras en la población fronteriza, donde en las últimas horas se intensificó el control con la presencia de efectivos militares debido a la inestabilidad de la cotización del peso argentino.
“Señor Presidente, esto es lo único que llevamos para nuestras familias”, manifestó una mujer que fue confundida como comerciante por efectivos policiales y militares que se instalaron en la tranca de Villazón, según informó la red de noticias Erbol.
Ante los problemas de la moneda del país vecino, algunas personas aprovecharon este fin de semana para proveerse de arroz, aceite, detergentes, entre otros, cuyos precios no son considerados ni siquiera importantes para ser tratados como contrabando.
Muchas personas se sorprendieron por el excesivo control, a diferencia de antes cuando dejaban pasar pequeñas cantidades de productos que eran transportados en flotas o vehículos particulares. El argumento de algunos funcionarios aduaneros fue que se trataba de gente dedicada al almacenamiento ante la posibilidad de que el peso argentino vuelva a subir.
Hasta el momento se desconoce el trabajo que desempeñarán exactamente los efectivos militares en estos controles recientemente anunciados, sin embargo, ya denunciaron excesiva violencia que no se vía en otros pasos ilegales, por donde la mercancía fluye en cantidades mucho más grandes sin pasar por los respectivos almacenes aduaneros.
En Tupiza, por ejemplo, se observó un similar panorama de violencia la noche del viernes, cuando denunciaron que soldados del Regimiento Chichas procedieron a decomisar mercancía en las calles.
Por su parte, el diputado tarijeño por Comunidad Ciudadana (CC), José Luis Porcel, dijo que mucha gente se dedica al pequeño comercio en Villazón, Bermejo y otras zonas del país porque no hay fuentes de empleo formales, además de que el Gobierno no da muestras de tener la capacidad de generar trabajo para los bolivianos.
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