En horas recientes la exdiputada del Movimiento Al Socialismo (MAS), Susana Rivero, admitió que chateó con el opositor Tuto Quiroga tras la renuncia de Evo Morales en 2019, de igual manera confirmó la realización de las reuniones en la Universidad Católica Boliviana “San Pablo”, para intentar una transición constitucional, sin embargo, advirtió que los opositores adelantaron el “Plan B”.
La exlegisladora detalló el contenido de los mensajes intercambiados con el opositor.
“Difundan los chats de Tuto Quiroga, por favor, para quienes aún tengan dudas de lo que pasó el 11 y 12 de noviembre de 2019. En ninguno se habla de Áñez. Se habla de amedrentamiento a mi persona, de la vida de mi familia, del avión mexicano y la seguridad de Evo”, explicó.
Tras prestar sus declaraciones en la Fiscalía, Quiroga presentó un documento de 14 páginas, en las que ratificó que las delegadas del partido de Gobierno estuvieron de acuerdo con que un senador de oposición asuma la Presidencia del Estado.
“Después de alrededor de una hora los congresistas se reintegraron a la mesa, donde las dos parlamentarias del MAS señalaron, sin dar mayores detalles de la reunión pequeña, que en virtud a las circunstancias que atravesaba el país lo más conveniente era que asuma un senador de oposición, eso mostraba que ellas declinaban de asumir el cargo; en esa línea señalaron que no tenían problema alguno con la Senadora Áñez, pero preferían al Senador Zamora”, precisó.
Nos obstante, Rivero insistió que en ese tiempo no hubo vacío de poder, y que quienes se reunieron en la UCB intentaron dirigir un diálogo político para una transición constitucional, según informó la Agencia de Noticias Fides.
“¿Por qué no mostraron chats de Tuto antes? Son prueba de lo que he dicho hasta el cansancio, que no había vacío de poder, que intentábamos dirigir el diálogo político para hacer transición constitucional, que el 12 de noviembre de 2019 un avión caza me perseguía, ese mismo día adelantaron su plan B”, escribió la exautoridad.
Por su parte, Quiroga aseguró que no existió ningún “golpe de Estado” como el MAS pretende imponer, según su criterio, es solo otra “tramoya” y “fábula” del “partido azul”; además, ratificó que el país vivió una sucesión constitucional.
Adicionalmente dijo que, si Jeanine Áñez fuera una mandataria inconstitucional, el Presidente Luis Arce es “hijo” de esa inconstitucionalidad, al igual que los parlamentarios y al fiscal General del Estado, Juan Lanchipa.
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