El proceso contra el líder del Movimiento Al Socialismo (MAS), Evo Morales, fue anunciado la presente jornada por el líder de Comunidad Ciudadana (CC), Carlos Mesa, bajo el criterio de incumplimiento de deberes durante la crisis política y social de 2019.
El también expresidente reclamó que previamente no dieron curso a un proceso que pretendía iniciarse por lo que llama el “fraude monumental de 2019”, sin embargo, ahora los criterios son otros.
“Acusaremos al expresidente Evo Morales en función de algo fundamental, incumplimiento de deberes y dejar vacante el cargo, no cumpliendo su responsabilidad básica para escapar del país, el culpable es él, este es un tema que llevaremos adelante y en el momento que lo hagamos ustedes lo van a conocer”, manifestó.
El adelanto de Mesa se dio tras conocerse la ampliación de la denuncia penal en su contra, anunciada por el Comité de Víctimas de Senkata y Sacaba y de la exdiputada Lidia Patty, principal impulsora del juicio contra la expresidente Jeanine Áñez.
La presente jornada el líder de CC acompañó a su asesor personal Ricardo Paz a prestar declaraciones respecto a su participación en la reunión propiciada por la Iglesita Católica en noviembre de 2019, en ambientes de la Universidad Católica Boliviana “San Pablo”.
Al respecto, Mesa aclaró que su correligionario asistió a ese encuentro en calidad de invitado, y mostró un fuerte espíritu “democrático” y de “pacificar al país”, según informó el portal de noticias Innovapress.
Aprovechando su presencia ante los medios de comunicación, no perdió la oportunidad de cuestionar el denominado caso “Golpe de Estado I”, impulsado por la Fiscalía.
“Este proceso, es un proceso espurio, falso que plantea un falso caso, con falsos testigos, falsos acusadores y con un equipo de juristas que no hace otra cosa que responder al mandato de Evo Morales, el verdadero responsable de un fraude monumental”, afirmó.
Además, recordó que él ya se desempeñó como testigo en el caso “Golpe de Estado”, y que en ese entonces declaró que no sería un “tipo funcional” de un proceso que es, según su criterio, político y no jurídico.
Aclaró también que en ese tiempo no reconoció al Tribunal, a los fiscales, ni la legalidad del juicio.
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