Crearon la Empresa Boliviana de Producción Agropecuaria con un patrimonio de 140 millones de bolivianos el miércoles precedente, con el objetivo de producir, procesar y transformar productos agrícolas y pecuarios, además de comercializarlos en el mercado interno y externo, dicha acción supervisada por la administración del Presidente Luis Arce. Los productores privados decidieron evaluar la decisión.
Se trata de una empresa pública nacional estratégica en la medida en que tiene la misión de generar excedentes económicos “para potenciar el desarrollo económico productivo y financiar la atención de políticas sociales del país”, según el Decreto Supremo 4701 aprobado el 20 de abril de 2022.
Consultados al respecto, productores privados indicaron que aún no se pronunciarán sobre esta decisión y que analizan el alcance de la norma, según El Deber.
La Empresa Boliviana de Producción Agropecuaria nace en un momento en el que el Gobierno y los sectores avícolas, lechero y porcicultor tratan temas relacionados con el abastecimiento de maíz y luego que la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) anunciara que producirá su propio trigo y maíz.
Asimismo, el Decreto 4701 establece que la nueva empresa estratégica estará bajo tuición del Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras, ente que será el encargado de su evaluación, seguimiento y control de actividades.
Además, recibirá tierras fiscales para desarrollar su giro de negocios y tendrá como domicilio la ciudad de La Paz, pudiendo establecer sucursales en todo el territorio nacional de acuerdo a disponibilidad financiera y necesidades identificadas.
El hecho de que empresas públicas como Emapa y ahora la Empresa Boliviana de Producción de Alimentos tengan como sede La Paz fue cuestionado en otras oportunidades por el sector privado, el cual indica que bajo esta condición la relación que tienen con estos proyectos se burocratiza más.
“Es necesario crear una empresa pública de producción agropecuaria nacional de carácter estratégico con el objetivo de fortalecer la soberanía alimentaria en el Estado Plurinacional de Bolivia, para dinamizar el mercado y la economía a través de la producción agropecuaria en tierras fiscales a ser asignadas para este fin, las cuales son propiedad del pueblo boliviano”, indica la norma.
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