Rusia protestó de manera formal este viernes por la ayuda valorizada en 800 millones de dólares en armamento militar a Ucrania, enviando una nota diplomática al Departamento de Estado del país norteamericano, en la que advierte de «consecuencias imprevisibles» en caso de que continúe el apoyo.
Esta nota se envió luego de que el Presidente Joe Biden autorizara el envío de 800 millones de dólares en apoyo militar a Ucrania, según el anuncio, el nuevo paquete incluía 11 helicópteros Mi-17 que inicialmente se habían destinado a Afganistán, 18 cañones Howitzer de 155 mm y 300 drones Switchblade más, además de sistemas de radar capaces de rastrear el fuego entrante y localizar su origen.
Según el documento, el Gobierno ruso hace «un llamado a Estados Unidos y sus aliados para que detengan la militarización irresponsable de Ucrania, que implica consecuencias impredecibles para la seguridad regional e internacional».
La portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova familiarizada con la nota reconoció que Rusia podría tomar acciones muy agresivas contra Estados Unidos y la OTAN.
Algunos medios de comunicación de Rusia también al pendiente de las acciones que su Presidente toma, calificaron los hechos como una “tercera guerra mundial”.
«No vamos a confirmar ninguna correspondencia diplomática privada”, fue lo que compartió un funcionario estadounidense.
“Lo que sí podemos confirmar es que, junto con los aliados y socios, estamos proporcionando a Ucrania miles de millones de dólares en ayuda a la seguridad, que nuestros socios ucranianos están utilizando con un efecto extraordinario para defender a su país de la agresión no provocada y los horribles actos de violencia de Rusia», añadió.
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