El club Wilstermann incumplió los acuerdos firmados por el pago de las deudas que arrastra desde 2020 con 13 futbolistas, quienes a través de la agremiación (Fabol), reactivarán estas demandas frente a la falta de seriedad de la institución cochabambina.
“Nos parece muy grave lo que hizo Wilstermann. Desde el 2020 los jugadores están reclamando el pago de estas deudas y han tenido la apertura y la predisposición, pero no vemos la misma actitud del lado de la dirigencia”, declaró David Paniagua, secretario General de Fabol.
Paniagua sostuvo reuniones con una comisión del club “aviador”, representada por Mario Guamán, en ese entonces vicepresidente, consiguiendo frenar las demandas que tenía fallos ejecutoriados, pero el dirigente renunció a su cargo por diferencias con el titular, Grover Vargas, quien desautorizó estos avances.
“Son más de 800 mil dólares en demandas de 13 casos que estaban paralizados, ahora se reactivarán y ya no nos vamos a sentar a dialogar con esta dirigencia que actúa de esta manera”, indicó Paniagua desde Santa Cruz.
El dirigente de los futbolistas colocó como ejemplo los casos de Leonel Justiniano y Juan Pablo Aponte, ahora jugadores de Bolívar y The Strongest, de manera respectiva, para denunciar la forma de actuar de los “aviadores”.
“Con Justiniano se firmaron tres documentos, los tres se incumplieron. Cuando el jugador fue a la empresa que vendía autos le dijeron que el club no tenía línea de crédito”, explicó Paniagua, y en el caso del lateral zurdo, el club entregó un cheque por 19 mil dólares que fue rechazado en el banco por no contar con los fondos.