El exsacerdote, Mauricio Víquez Lizano, fue encontrado culpable de los delitos de abuso sexual y violación agravada contra un menor, tras una audiencia con el tribunal de Costa Rica que lo condenó a 20 años de prisión, informó el Ministerio Público del país centroamericano.
La sentencia fue dictada por el Tribunal Penal de Desamparados; los jueces Ana Mora, Henry Castro y Willy Escalante encontraron a Víquez, quien se desempeñó como vocero de la Conferencia Episcopal de Costa Rica, responsable de agredir al menor cuando era párroco en la iglesia San Juan Bautista en Patarrá, en Desamparados, provincia de San José.
«De acuerdo con la acusación, los hechos ocurrieron en el 2003, cuando Víquez era cura en la iglesia de Patarrá de Desamparados. En ese momento, la víctima tenía 11 años de edad y trabajaba en distintas labores que le encargaban en el templo», detalló la Fiscalía.
El Ministerio Público de Costa Rica señaló que se demostró que Víquez «se valió de su posición de poder, autoridad, relación de confianza con la víctima y de su condición de sacerdote, para cometer las agresiones sexuales».
De igual manera, se explicó que el exsacerdote se aprovechó de la vulnerabilidad de la víctima y de sus condiciones personales para cometer los delitos.
De acuerdo con las investigaciones de la Fiscalía, Víquez comenzó dando dinero al menor a cambio de mandados o tareas pequeñas, así es como fue ganándose su confianza; posteriormente lo abordó sexualmente hasta que abusó de él.
UNA DE CUATRO DENUNCIAS
La víctima, de apellidos Alvarado Quirós ahora de 30 años, presentó la denuncia en contra de Víquez en 2018, al conocer las acusaciones que hicieron otros tres hombres quienes aseguraron que el exsacerdote también abusó sexualmente de ellos.
Los otros tres denunciantes fueron Michael Rodríguez, Anthony Venegas y Carlos Muñoz; sin embargo, sus denuncias fueron consideradas prescritas y solo procedió la de Alvarado.
No obstante, Venegas y Rodríguez acompañaron a Alvarado en todo el proceso judicial, estuvieron presentes el miércoles precedente en la sala de juicio y al escuchar la sentencia, los cuatro se abrazaron.
«Somos un grupo de víctimas y sobrevivientes, unidos logramos modificar leyes, inspirar sanación, dar un mensaje de lucha y sobre todo encontrar justicia. Valientes y resilientes, lo logramos», escribió Venegas en su cuenta en Twitter.
ANTECEDENTES
Tras ser denunciado en 2018 Víquez huyo de Costa Rica a principios de 2019, pero un juez difundió una orden de captura internacional. En agosto de ese mismo año el exsacerdote fue detenido en la localidad de San Nicolás Garza, Nuevo León, México, y fue extraditado a su país en mayo de 2021 para enfrentar a la justicia.
Víquez presuntamente habría sido encubierto por uno de sus colegas, el Arzobispo de San José, monseñor José Rafael Quirós, quien ahora enfrenta a la justicia.
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