Ante los casos de los exjefes policiales investigados por narcotráfico, el gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, consideró que Bolivia está ante una “vergüenza internacional”, afirmando que esto es “gracias a Evo Morales”.
Mediante sus redes sociales, el gobernador cruceño, señaló que no fue “casual” que Evo Morales puso como jefes de lucha contra el narcotráfico a René Sanabria, Óscar Nina y Maximiliano Dávila.
“Los nexos del Gobierno de Evo Morales con el narcotráfico han sido denunciados muchas veces, pero como él estuvo en el poder nunca llegó a aclararse nada. Poco a poco van apareciendo evidencias del poder del narcotráfico y sus conexiones con la política”, aseveró.
Resaltó que, en el caso de Dávila, este ya fue denunciado, pero según su criterio, lo protegieron desde el Gobierno.
Asimismo, aseveró que las dictaduras de los ‘80 convivieron con el narcotráfico y costó mucho lavar esa imagen del país.
“Hoy lamentablemente vemos que nuestro país ha retrocedido décadas y estamos ante la vergüenza internacional de ser el único país donde los mismos delincuentes narcotraficantes son nombrados jefes de la lucha contra el narcotráfico, todo gracias a Evo Morales”, concluyó.
Postura de Dávila
Por su parte, el coronel Maximiliano Dávila al momento de ser ingresado a la cárcel de San Pedro, acusó al ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, de supuestamente querer incriminar a Morales.
“Lo está queriendo incriminar al Presidente Morales”, indicó.
Manifestó que es “víctima” de Del Castillo y que supuestamente se violó todo el procedimiento en su contra.
“Soy inocente, soy víctima de ese pequeño burgués que es el Ministro de Gobierno, pequeño burgués que no sabe lo que hace en este Estado Plurinacional Comunitario”, sostuvo.
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