Se viven momentos de tensión en Australia después que se conociera la decisión del juez del Tribunal del Circuito Federal de Melbourne, Anthony Kelly, de ordenar al Gobierno australiano a implementar la orden de liberación, entregarle su pasaporte y sus efectos personales y pagar los costes legales de Novak Djokovic.
Según informó la Asociación Australiana de Prensa (AAP), esta determinación se llevó a cabo después de que los abogados de la ministra de Asuntos Internos, Karen Andrews, consideraran que las circunstancias en las que se produjo la cancelación de la visa del tenista “no fueron razonables dadas las circunstancias”.
Tal como indicó el informe que publicó la AAP, el tenista llegó a Australia el miércoles por la noche y fue durante la madrugada del jueves cuando se produjo el inconveniente con sus documentos de exención médica para participar del primer Grand Slam del año.
Sin embargo, desde Serbia, las expectativas no son buenas después que el presidente del Parlamento Ivica Dacic asegurara que cree que las autoridades australianas se están preparando para deportar al tenista, a pesar de que el juez haya ordenado la liberación del número uno del tenis mundial.
Mientras tanto, su hermano, Djordje Djokovic, aseguró que Novak ya es libre y que ya ha entrenado sobre las pistas y que acudió a Australia con toda la documentación. También subraya que su hermano «ha sido etiquetado muchas veces, pero que lo único que defiende es la libertad de elección y se ha hecho justicia».
En el caso que no suceda algo extraño, Novak Djokovic tiene esta semana para alistarse de la mejor manera posible y afrontar este torneo desde el lunes 17 enero, fecha en que le toca debutar en el Australian Open.