Varios ambientalistas y ciudadanos cuestionaron la tala de un árbol centenario en la plaza Manuel de Castro y Padilla, pero según la Dirección de Salud Ambiental del Gobierno Autónomo Municipal de Oruro (GAMO), se evidenció que las raíces de la especie, estaban entrando a un estado de putrefacción.
Este habría sido el motivo para la inclinación de 45 grados del árbol de más de 100 años, ya que al tener encima cemento, las raíces no pudieron expandirse y se registró un riesgo de afectación a las propiedades cercanas.
“Era inevitable no hacer la tala, debido a que ya se ha urbanizado y que en los alrededores se hicieron obras civiles, las raíces ya no tienen por donde desarrollarse y se están entrado a una especie de putrefacción por el tema de compresión, porque hay obras de cemento. Es uno de los factores del porque se ha inclinado”, manifestó el responsable de la Dirección de Salud ambiental, Julio Cepeda.
REGISTRO
De acuerdo al informe, las precipitaciones pluviales comienzan a afectar a árboles antiguos cuyas raíces comienzan a debilitarse por una posible putrefacción y se “ladean” o inclinan.
“Este árbol ha puesto en riesgo a las personas, por ello, basados en el Decreto Municipal 034/21 de la Ley del Árbol, que indica que la tala está permitida cuando se considera peligroso para la integridad física de las personas. Ahora estamos comenzando a hacer un registro de árboles que pueden estar afectados”, detalló Cepeda.
ÁRBOL
El árbol recién talado tenía una altura aproximada de 50 metros y tiene más de 100 años. Según algunos historiadores, esta especie de pino ciprés se calcula que fue sembrado en 1917.
PETICIÓN
Al ver la inclinación de 45 grados, fueron los vecinos afectados quienes pidieron alguna solución ante el riesgo de destrucción de algunos inmuebles.
