El acuerdo entre Conmebol y UEFA para que las diez selecciones sudamericanas comiencen a disputar la Nations League (Liga de Naciones) a partir de 2024 fue un duro revés para Gianni Infantino, presidente de la FIFA, quien sostiene el proyecto de jugar la Copa del Mundo cada dos años, el mandamás salió a ratificar su postura una vez más.
«Si no queremos perder a los jóvenes del fútbol hay que ofrecerles posibilidades para emocionarlos. No hay nada como un Mundial cada dos años para esto. Se ha hecho una encuesta y la generación más joven quiere un Mundial con más frecuencia después de más de cien mil votos», sostuvo Infantino en la cumbre -con 207 federaciones- en la que fue tratado el calendario internacional.
«El objetivo es analizar la situación de todo el mundo. Mi trabajo consiste en trabajar con todas las partes y reconciliar posturas y ver qué es lo bueno para el mundo del fútbol y cómo podemos avanzar para que haya menos brechas. Cómo invertir en el fútbol juvenil para dar oportunidades a todos los países. Seguimos trabajando en ello», agregó.
Además, argumentó: «Es un proyecto muy importante que ayudará a cerrar la brecha entre los que tienen y los que no. Todo el mundo se beneficiaría, los grandes, los pequeños, los ricos y los pobres. Todos tendrían posibilidades adicionales de jugar y tendrían ingresos adicionales protegiendo a las ligas y pensando en los aficionados. Esto es lo que se ha presentado hoy».
EQUIDAD ECONÓMICA
Según informó el propio Infantino, del cien por cien de los ingresos de las selecciones nacionales, sólo el 30 por ciento corresponde a las sudamericanas. Con la propuesta de FIFA, en cambio, la repartija pasaría a ser 60-40, aunque sin pérdida para Europa, dado que, aun cediendo un 10 por ciento, ganaría 2 mil millones de euros más que con el porcentaje actual.
«El prestigio del Mundial no depende de su frecuencia, es absoluto. Si no, se tendría que jugar no cada cuatro, cada 40 años y sería diez veces más prestigioso. Un Mundial es prestigioso por la calidad que tiene y por el impacto global. 4.000 millones de personas miran el Mundial y los estudios nos demuestran que no habría ningún problema», comentó.