La Procuraduría General del Estado y la Contraloría iniciaron investigaciones contra el Presidente de Perú, Pedro Castillo por reuniones que habría realizado fuera del Palacio Presidencial para, presuntamente, acordar beneficios en las contrataciones públicas.
Esta polémica se dio a conocer luego que el programa televisivo denominado Cuarto Poder mostrara que el Mandatario sostuvo encuentros con ministros, congresistas y empresarios fuera de los registros oficiales, en una vivienda del distrito de Breña, en la Capital del vecino país, Lima.
Según el reporte, entre los invitados habría estado la empresaria asesora de una de las compañías que se adjudicó a la construcción del Puente Tarata III, Karelim López Arredondo. También se destacó la presencia de un vehículo ligado a la empresa Brunner SAC, cuyo gerente general es More Llens Brunner Ruiz, quien tiene dos contratos millonarios con el Estado peruano.
Asimismo, luego de hacerse conocida esta información, el lunes precedente, desde la Contraloría anunciaron el inicio de una indagación sobre la unidad ejecutora Provías Descentralizado, a cargo de la infraestructura vial, y dependiente del Ministerio de Transportes y Comunicaciones. Es decir, revisarán las licitaciones otorgadas.
El organismo manifestó que las normas peruanas determinan que los Presidentes informen el detalle de sus reuniones o gestiones en el marco de su mandato, según reporte del portal RT.
«El incumplimiento de estas obligaciones afecta la integridad, la credibilidad, la institucionalidad y es pasible de responsabilidades por los órganos sancionadores competentes», remarcaron desde esa cartera del vecino país.
De igual manera, desde la Procuraduría pidieron información al secretario del despacho presidencial sobre estos encuentros, y «que indique si en dichas reuniones se realizó un debido control de los asistentes». Para ello, el procurador se basó en «la ley que regula la gestión de intereses de la administración pública».
A su vez, la Defensoría del Pueblo y dirigentes detractores a Castillo ya le solicitaron al Ministerio Público que inicie una investigación propia.
En respuesta a tal escándalo, el Jefe de ese Estado, se defendió con un mensaje público y rechazó haber participado de encuentros que hayan favorecido a intereses particulares. Con ese tono, indicó que las reuniones oficiales únicamente se realizan en Palacio de Gobierno.
“En mi domicilio solo recibí visitas de carácter personal», declaró el Mandatario peruano.
Según Castillo, desde que ejerce la Presidencia de Perú, el 28 de julio, una minoría de partidos políticos y grupos económicos no aceptaron el resultado electoral y siempre buscaron atentar contra la voluntad popular. Según Castillo, «nunca aceptaron que un campesino, un rondero, un maestro dirija la nación y promueva cambios estructurales en el país».
Finalmente, la primera autoridad de ese país, manifestó que el objetivo de estos grupos es bajar al Presidente (Pedro Castillo) sin ningún sustento, y con absoluta “irresponsabilidad” por las consecuencias que estos actos “antidemocráticos” tienen para la población.
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