Debido a sus acciones ante determinadas situaciones, como la crisis política boliviana de 2019, Bolivia y Argentina cuestionaron el jueves precedente a la Organización de Estados Americanos (OEA) y llamaron a «repensar» el grupo regional y que no intervenga en asuntos internos.
El ministro de Asuntos Exteriores de Argentina, Santiago Cafiero, ha criticado en el pleno de la última sesión extraordinaria de la asamblea del ente, el «triste» papel de la OEA «interrumpiendo el orden democrático» en Bolivia durante la crisis política de 2019.
«Se debe despejar la triste historia reciente de haberse apartado de sus fundamentos al apoyar la interrupción al orden democrático como sucedió en Bolivia», mencionó el canciller argentino, Santiago Andrés Cafiero, según reporte del portal Europapress.
El comentario surge al momento de cuestionar el trabajo que realizó el secretario general de la OEA, Luis Almagro, que según el funcionario argentino, apoyó a los sectores de la oposición y las Fuerzas Armadas para no aceptar la “victoria” de Evo Morales en las elecciones 2019.
Cafiero aseguró que si la OEA se hubiera mantenido fiel a sus principios, entre ellos los de no injerencia en los asuntos internos tanto de sus Estados miembros, como del resto de países, no se habría lamentado «esta vergonzosa página» en la historia latinoamericana.
«Por otra parte, tampoco es válido el recurso a sanciones que terminan vulnerando la estabilidad y la convivencia pacífica de las sociedades», pues de manera irremediable conducen a «posturas radicales», que «sólo perjudican el disfrute de los derechos básicos de las poblaciones más vulnerables», explicó el diplomático.
En la misma sesión, el ministro de Relaciones Exteriores de Bolivia, Rogelio Mayta, instó a reflexionar sobre el sentido de la OEA y a pensar sobre si cumple efectivamente sus propósitos y principios.
«La OEA no estuvo ni está en los temas de preocupación central de nuestro continente… Es buen tiempo para repensar», declaró Mayta.
Finalmente, el representante de la diplomacia boliviana se refirió a la crisis de Bolivia de 2019, y calificó como «gravitante e inadecuado» el rol de Almagro ante dichos conflictos, Asimismo, argumentó que el país no puede «dejar de apuntar» a su «verdad» porque «el precio que tuvo que pagar el pueblo en vidas y heridas es enorme».
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