Desde la empresa alemana BioNTech junto a Pfizer anunciaron la aceleración, este mes, de las pruebas para determinar si una forma modificada de su inmunización puede proteger de mejor manera contra la variante Delta.
El ensayo clínico, cuyos resultados se anticipan para el cuarto trimestre, también examinará si resulta eficaz una combinación de inyecciones que incluya una vacuna diseñada para la variante Delta y otra para la cepa original del virus descubierto por primera vez en Wuhan.
La cofundadora y directora médica de BioNTech, Özlem Türeci explicó que la vacuna se puede adaptar a las nuevas cepas con una rapidez sin precedentes debido a la tecnología de ARN mensajero utilizada por la empresa.
Esta tecnología usa el código genético de la proteína espícula del virus SARS-CoV-2, el virus que causa el Covid-19, para enseñarle al cuerpo a producirla y, por ende, aprender a combatirla.
“La vacuna que estamos usando ahora tiene la proteína de pico original, y lo único que básicamente necesitamos hacer es cortar esta parte y tomar la proteína de pico de la variante Delta, De esta manera, desarrollar una nueva versión de la vacuna puede llevar apenas unas semanas”, señaló la científica al medio de comunicación Fast Company.
Por el momento, autoridades de BioNTech creen que no será necesario modificar la vacuna para apuntar a la variante Delta, ya que una tercera dosis de refuerzo es suficiente para aumentar “fuertemente” la protección contra esta cepa.
Por razones prácticas, si es eficaz, es un proceso más fácil que hacer una vacuna completamente nueva.
Debido a la posibilidad que en los próximos seis a 12 meses, surjan más variantes que requieran la adaptación de la vacuna, BioNTech está probando versiones de la vacuna para todas las cepas, incluidas alfa, beta, gamma, delta, épsilon, lamda y theta.
“Estamos preparando la columna vertebral de ADN para asegurarnos de que, si fuera necesaria una nueva variante de vacuna, podamos actuar con rapidez”, finalizó Türeci.
/MDCB