De cada diez pacientes internados por Covid-19 en la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) del Hospital Obrero Nº4 de Oruro, ocho son dados de alta tras recuperarse y dos llegan a fallecer, según informó el jefe de esa unidad, Pedro Goytia.
Saliendo de la tercera «ola» de la pandemia del Covid-19, la UTI del nosocomio que meses atrás se encontraba totalmente colapsada, actualmente tiene camas disponibles para la atención de pacientes Covid-19 críticos con compromiso pulmonar.
“Hemos respondido de manera satisfactoria puesto a que antes, de diez pacientes ocho fallecían y dos sobrevivían, ahora hemos volcado esos números y ocho sobreviven y dos fallecen”, manifestó Goytia.
Según el galeno, mucho influye el estado de salud en el que ingresa el paciente, ya que existen personas que llegan a internarse en la fase inicial de la enfermedad y otras que ingresan ya en etapa terminal con la enfermedad muy avanzada.
Vacunación
En esa línea, Goytia recomendó a toda la población acudir a los centros de vacunación para inmunizarse frente al virus, ya que, si bien aún con la vacuna un paciente puede enfermarse, pues el inmunizante evitará que el mismo llegue a internarse.
“Recomendar a la población que acudan a los centros de vacunación puesto que se ha demostrado que la vacuna ayudará a que no llegues a estos estados críticos, puede haber el contagio, pero la enfermedad no será grave”, indicó.
Actualmente, la UTI a más de un año de la llegada de la pandemia del Covid-19, recibe transferencias de pacientes críticos provenientes de Huanuni, Uncía, Uyuni y de la población de Oruro.
“Gracias a Dios ya tenemos la experiencia suficiente para poder sacar adelante a los pacientes y mostrarles que la terapia intensiva es bien compleja puesto que trabajamos con máquinas porque es el último paso de lo que es la vida y la muerte”, dijo.