Con la marchista Ángela Castro, Bolivia concluye su participación en los XXXII Juegos Olímpicos de Tokio 2020. La representante boliviana consiguió la ubicación 48 con tiempo de 1h42’35”, en la marcha atlética 20 kilómetros, en el Circuito del Parque Odori, en la tarde del día de la independencia de Bolivia (madrugada en Bolivia).
La competencia fue ganada por la italiana Antonella Misano que paró los cronómetros en 1h29’12”. En segundo lugar, quedó la colombiana Sandra Lorena Arenas con registro de 1h29’37”, y la tercera ubicación fue para la china Hong Liu con 1h29’57”. Participaron 58 atletas. Cinco no llegaron a la meta. El calor y los desmayos fueron parte de la competencia realizada en la ciudad de Sapporo que reemplazó a Tokio por razones climáticas y para proteger a los deportistas. La competencia se desarrolló bajo estrictas medidas de seguridad para los participantes, el poco publico y el trabajo de los periodistas.
Castro recibió asistencia médica luego de cruzar la meta. Los organizadores le facilitaron una silla de ruedas para su recuperación. Ella y su entrenadora Martha Marín indicaron que desde las primeras vueltas al circuito los calambres hicieron su presencia. Luego de la competencia, el presidente del Comité Olímpico Boliviano, Marco Arze, pasó a saludar a la atleta en la zona mixta autorizada para dirigentes y periodistas.
La marchista paceña estuvo en la ceremonia de inauguración del 23 de julio, en el Estadio Olímpico de Tokio, junto a los otros cuatro componentes de la delegación. Ella será la única atleta boliviana en la ceremonia de clausura programada para la noche del domingo 8 de agosto donde será la portadora de la bandera del Estado Plurinacional de Bolivia. (Cobertura de Walter Challapa, especial para LA PATRIA).