Varios países del mundo incluyendo Bolivia son afectados por el retraso de las entregas de lotes de las vacunas Sputnik-V por el laboratorio ruso Gamaleya, provocando que las campañas de vacunación masiva contra el Covid-19 sean perjudicadas.
El Presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei comunicó que sustituirán los ocho millones de inmunizantes del laboratorio ruso hasta finales de año debido a los retrasos de entregas de los lotes.
Varios países del mundo recurrieron a las dosis de Sputnik-V por la necesidad de vacunar lo más antes posible a una gran mayoría de su población para disminuir los contagios y reactivar la economía en sus territorios.
Un asesor presidencial de Argentina mencionó que la escasez de las inoculaciones ponía en riesgo al Gobierno de su país porque la población estaba limitada en recibir la segunda dosis de la empresa Gamaleya dentro del periodo establecido.
Por su parte, el Presidente de Rusia, Vladimir Putin indicó que la vacuna de su país es parte de una ambiciosa iniciativa de Kremlin para que el país soviético sea actor principal del negocio internacional de vacunas.
El profesor de política y relaciones internacionales de la Universidad de Oxford, Samuel Ramani afirmó que las empresas de las vacunas realizaron sus planes de exportación en base a la producción local.
“Los promotores diseñaron sus planes de exportación en torno a una producción local que sobrestimaba enormemente la capacidad local”, dijo Ramani.
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