Un diagnóstico revela que el contrabando genera una pérdida anual de $us 2.300 millones al país, el estudio realizado por la Cámara de Industrias, Comercio y Servicios de Cochabamba (ICAM) indicó que ello representa la pérdida de 400.000 fuentes de empleo en el territorio boliviano.
“En la actualidad un 25 por ciento de la leche consumida en el territorio nacional es de contrabando que pone en peligro el sostén de 7.000 familias de Cochabamba”, informó el presidente de ICAM, Ramón Daza.
Asimismo, Daza señaló que en el sector de productos alimenticios se pierden $us 400 millones por la internación de productos de contrabando, y que según las estimaciones del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), en el caso de los medicamentos la pérdida es de $us 30 millones.
Mientras que en el rubro textil la pérdida anual es de $us 80 millones. Este estudio señala también que entre 2014 y 2018, 65.000 fábricas de este sector “cerraron sus puertas” por la competencia desleal del contrabando.
Además, según cuantificaciones del Centro Boliviano de Estudios Económicos (Cebec), el mercado informal de televisores pantalla plana y celulares, genera una pérdida de $us 576 millones.
Otro de los sectores afectados es el de las bebidas alcohólicas que representa una pérdida de aproximadamente $us 118 millones en impuestos.
“Si no existiese contrabando en Bolivia, la economía podría crecer entre un 1% y 1.5% más. La adquisición de productos de contrabando se traduce en el cierre de empresas”, dijo Daza en contacto con el diario El Deber.
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