Wilma Flores Zurita de 29 años es la víctima que fue apuñalada el domingo precedente por su expareja y deja dos niños en la orfandad, de dos y seis años. Los amiliares piden justicia para que este hecho no quede en la impunidad, aunque se conoce que tanto la mujer y el presunto homicida vivían en la misma vivienda, aunque estaban separados.
“Ahora ella ha dejado dos niños de seis y dos años huérfanos”, dijo este lunes Jaime Zurita, familiar de la fallecida a El Deber.
Wilma y el presunto homicida fueron pareja. Estaban separados desde hace un año, pero los familiares de la víctima adujeron que él la acosaba y, supuestamente se negaba a aceptar que ella pudiera tener otra pareja.
Por otra parte el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv), coronel José María Velasco detalló que el autor confesó que compró un objeto cortante del mismo supermercado y que estaba siguiendo a la víctima.
El presunto homicida, Marcelo Martínez acusado del asesinato ya tenía una denuncia por violencia familiar, sin embargo se desconoce por qué la justicia no actuó.
Martínez será puesto a disposición del Ministerio Público de Santa Cruz bajo la acusación de feminicidio y se pedirá su reclusión preventiva mientras se investiga este hecho.
El domingo por la mañana Wilma fue apuñalada por su expareja en uno de los ingresos del supermercado de Hipermaxi en la capital cruceña, tras el hecho de sangre, testigos que estaban en el lugar quisieron auxiliarla, pero ella se desvaneció y se desangró hasta morir.