Varios caimanes han quedado atrapados entre el hielo de los pantanos de Oklahoma en Estados Unidos, sin embargo, estos reptiles han ido habituándose a la temperatura gélida, aprendiendo a sobrevivir en esas condiciones. El suceso fue registrado en la tercera semana de febrero por el Departamento de Conservación de la Vida Silvestre de Oklahoma (ODWC).
Las bajas temperaturas que azotan el Sur de los Estados Unidos han obligado a estos reptiles a optar por una estrategia que los ayuda a sobrevivir en el intenso frío.
Debido a esta estrategia muchos de los habitantes del lugar pensaron que los reptiles se encontraban muertos, pero simplemente están hibernando, lo que ha impresionado a mucha gente por su manera peculiar de supervivencia.
En el condado estadounidense de McCurtain se han registrado reptiles cuyos hocicos sobresalen del agua helada donde pareciera que los animales se encuentran muertos, pero se trata de una respuesta natural que mantiene a estos animales con vida y funciona como mecanismo de adaptación al clima extremo.
Las mandíbulas de estos animales actúan como una especie de “esnórquel”, que les permite respirar aun estando atrapados entre el hielo, mientras bajan su metabolismo de forma similar de los mamíferos durante la hibernación.
«Los caimanes que no están dentro de las guaridas de brumación sino en aguas abiertas se han adaptado a estos eventos de formación de hielo. Mientras puedan mantener las fosas nasales por encima del nivel del agua, deberían sobrevivir», explicó el Servicio Forestal de Estados Unidos.
Estos animales se ven obligados a enfrentar temperaturas bajo cero, es por este motivo, que prefieren no permanecer en las orillas como lo suelen hacer en verano ya que en el exterior puede hacer más frío que dentro del agua.
De acuerdo a la última actualización de supervivencia de los caimanes, el 24 de febrero, biólogos del Departamento de Conservación de la Vida Silvestre de Oklahoma (ODWC) pudieron monitorear un grupo de la población de reptiles, en la cual reportaron una tasa de supervivencia del 100 por ciento en muestras adultas.
Lamentablemente algunos de los caimanes más jóvenes del grupo monitorizado no sobrevivieron a las bajas temperaturas registradas en el condado, informó la ODWC.
La población de Oklahoma permanece en la espera de buenas noticias sobre los grandes reptiles.
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