El candidato por Comunidad Ciudadana (CC), Carlos Mesa, reconoció la mañana de este lunes su derrota sobre la base de los resultados preliminares de las elecciones del domingo que dan como ganador en primera vuelta a Luis Arce del Movimiento al Socialismo (MAS), sin embargo anunció que su alianza asumirá el liderazgo de la oposición democrática del periodo 2020-2025.
“En el contexto de nuestros desafíos, el pueblo boliviano nos ha encomendado un mandato, el pueblo boliviano a votado y a decidido el mandato a cada quien, a CC le ha dado ser la cabeza de la oposición democrática del periodo 200-2025 y vamos a asumir esa responsabilidad con claridad, con conciencia y con responsabilidad. Somos la cabeza de la oposición y actuaremos como tal”, señaló el candidato en una declaración ante la prensa, acompañado de su candidato vicepresidencial, Gustavo Pedraza.
Mesa admitió que el resultado del conteo rápido de votos es “muy contundente y muy claro” en la diferencia entre el primer candidato y CC, sin embargo dijo que, “nos toca como corresponde a quienes creemos en la democracia y nos toca a quienes dijimos que íbamos a reconocer el resultado, fuera favorable o no, admitimos que hubo un triunfador en esta elección».
Por otro lado, el candidato ve poca probabilidad en que los resultados finales y oficiales del Tribunal Supremo Electoral (TSE), vayan a modificarse, pero dejó claro que existe un ganador en primera vuelta.
“Obviamente los esperaremos, sobre todo para conocer la composición de la Asamblea Legislativa», (…) pero que quede claro que CC asume que el resultado que conocimos ayer es un resultado que define claramente que no hay segunda vuelta nuestra conciencia democrática da a conocer esa realidad”, apuntó Mesa.
Asimismo, dijo que la misión histórica es construir un sistema democrático en el que la oposición tenga una voz, iniciativas y lleve adelante la fiscalización adecuada.
“El país hereda una crisis de salud, una crisis económica y una crisis de corrupción y vamos a demandar a quienes gobiernan Bolivia la solución de esas crisis, que son muy profundas y que requieren una actitud distinta de reconocimiento de errores y de establecimiento de una línea en la que seremos muy firmes y muy claros”, anunció.
Por otro lado, enfatizó que para CC no es el fin, sino el comienzo y que cuenta con el temple y la fuerza para llevarlo adelante como corresponde.
“Este no es un tiempo en el que uno esté para mirar hacia abajo o para sentirse triste en absoluto, estamos convencidos de que el mandato del pueblo boliviano se debe respetar, y el mandato estableció una estructura política para nosotros, que es un gran desafío: independencia de poderes, alternancia en el poder, el respeto a las instituciones, la construcción de espacios de credibilidad es un imperativo al que todos estamos obligados”.