Desde gestiones anteriores, varios funcionarios de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) estrían involucrados en acciones irregulares relacionadas en la clonación y suplantación de matrículas de aeronaves, muchas vinculadas al narcotráfico.
Así reveló el informe de Registro Aeronáutico Nacional signado con el número 0075/2020 H.R. 1088/2020 del 14 de enero de 2020, documento al cual tuvo acceso Gaceta del Sur y hoy lo publicó en su portal, en la que establece que al menos siete aeronaves pasaron por más de una vez por talleres aparentemente clandestinos, tras sufrir serios daños en accidentes aéreos en el departamento del Beni.
“De todos los casos analizados se pueden establecer serias irregularidades por parte de los funcionarios de la DGAC, en franco incumplimiento de deberes con objeto de brindar beneficios ilegales a terceras personas a través de la clonación y suplantación de matrículas y aeronaves de la DGAC, pero no se asumieron las acciones legales pertinentes, lo que ameritará una investigación y procesamiento en grado de corresponsabilidad con los particulares y funcionarios públicos involucrados”, señala el informe remitido al director interino de esa institución, Boris Terán Soto en enero de este año, según refleja Gaceta del Sur.
Muchas de las avionetas que son mencionadas en el documento sufrieron accidentes con daños irreparables, sin embargo, con el paso del tiempo y en complicidad con los funcionarios, muchos de los cuales siguen en ejercicio de sus funciones, los propietarios solicitaron el certificado de aeronavegabilidad para volver a volar.
Varias de las avionetas están involucradas con el tráfico de drogas, en su mayoría provenientes del Perú, rumbo al Brasil y Paraguay.
Según Gaceta del Sur, confirmó la clonación de matrículas de avionetas, que en su mayoría están relacionadas al narcotráfico y eran parte de una investigación a partir de la Unidad de Transparencia y Lucha Contra la Corrupción del Ministerio de Obras Públicas, entidad que evidenció irregularidades que se cometen en esa repartición.
CLONACIÓN
Entre los casos de clonación de matrícula está el de la avioneta CP-1231 cuyo registro fue emitido mediante testimonio No. 183/77 de 12 de abril de 1977 y fue transferido el 14 de noviembre de 2008, fue rehabilitada en febrero de 2010.
Se menciona en el informe que la aeronave sufrió un accidente en el 2013 que no consta en el “file” y el 25 de febrero de 2016 se revoca el certificado de matrícula CP 1231.
En octubre de 2017 se solicitó la rehabilitación y con el aval del técnico David M. quien “eleva un informe de verificación de datos técnicos No. ATIO/TDD/585/344/2017, de 29 de noviembre de 2017 adjunto fojas 361, indica que la aeronave quedó con todos los componentes a objeto que se de viabilidad al trámite”, por lo que se dispuso el inicio de acciones legales pertinentes y que las autoridades a la fecha no las han activado.
Otro caso irregular, es el de la avioneta con placa CP-2535 adquirida en los Estados Unidos por Cristine Muchelle Urnezis de Rapozo (Martín Rapozo Villavicencio habría exportado desde Estados Unidos a Bolivia más de 30 avionetas. IDL-R), en septiembre de 2008.
Los antecedentes de vuelo refieren que la aeronave fue quemada en el Perú e investigada por narcotráfico. Sin embargo, en diciembre de 2017 aparece el plan de vuelo No. 0050317.
Tras la investigación se evidenció que en el caso de la avioneta CP-2535 se falseó el “data plate”, es decir, el registro de la aeronave, del fuselaje y el motor, situación que motivó para que su certificado de aeronavegabilidad sea revocado, a pesar de ello, la DGAC permitió que opere por un año y medio, con matrícula clonada, hasta que fue incautada por la fuerza anticrimen el 21 de febrero de 2020.
Sin embargo, el 4 de junio de 2019 se solicitó el certificado de aeronavegabilidad, evidencia que muestra alteración en el documento de la DGAC, con el detalle que se encontraba “vencido” y no “revocado”, pese a esa situación la avioneta siguió operando. El hecho fue de conocimiento, del entonces director de la DGAC, general Celier Aparicio.
MÁS CASOS
Por otro lado, están en investigación dos funcionarios de la DGAC, una de ellas es la directora Jurídica, Lenny Sanz Guerrero por irregularidades en la rehabilitación de matrícula para la avioneta CP-1216, proceso que se encuentra en investigación del Ministerio Público en el caso LPZ 1814324.
En esa misma situación, está el secretario General, Carlos Medinacelli quien tiene un proceso pendiente por el mismo caso de clonación de matrículas de aeronaves investigado por la Fiscalía y signado con el No. de caso LPZ 1309239/13.
En el caso de ambos funcionarios, se presume, gozan de la protección de las autoridades de la DGAC, por eso que aún prestan servicios en esa repartición del Estado. El jefe de Transparencia de la DGAC, Omar Durán, aseguró que este y otros casos seguirán en investigación y personalmente hará el seguimiento respectivo, “porque no puede ser que funcionarios públicos incurran en casos de corrupción flagrantes”, reportó Gaceta del Sur.
