Las 24 organizaciones que forman la red IFEX-ALC, condenaron las amenazas, agresiones y otro tipo de ataques que sufrieron varios medios de comunicación de Bolivia en las recientes semanas, debido a la convulsión social y la crisis política en la que se encontraba, tras los resultados presentados por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) de los comicios del 20 de octubre.
La Defensoría del Pueblo de Bolivia registró, hasta el reciente 11 de noviembre, un saldo de más de 438 personas heridas, 227 detenidas y 4 fallecidas durante las protestas y enfrentamientos que se suscitaron en el país.
Sin embargo, la Asociación Nacional de Prensa de Bolivia (ANP) ha documentado que un total de 64 periodistas fueron agredidos durante los enfrentamientos, marchas y la convulsión social que se vivía en el territorio boliviano.
Varios medios de comunicación escrita cesaron la producción de sus ediciones debido a que debían resguardar la integridad de sus periodistas.
El clima político que se vivió en el país en las últimas tres semanas, desde las elecciones del 20 de octubre, fue de alta tensión porque algunos ciudadanos no estaban de acuerdo con los resultados electorales, y realizaron diferentes protestas en las diferentes ciudades de Bolivia.
Varios periodistas que se encontraban cubriendo dichas manifestaciones fueron víctimas de numerosos tipos de amedrentamiento tanto por los policías como por los marchistas.
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