Pobladores de la población fronteriza de Pisiga en el departamento de Oruro, se encuentran movilizados y preocupados ante la falta de suministro de agua potable, que dejó sin este elemento esencial a toda la población.
El problema de falta de agua se originó cuando los militares del Comando Estratégico Operacional (CEO) realizaban trabajos de excavación de zanjas. Durante esta labor dañaron la conexión principal y dejaron sin agua potable a todos los pobladores de la zona.
El centro de salud de la población, la Unidad Educativa Mejillones, instalaciones de la Aduana Nacional, puestos de control, puestos de venta y baños públicos, se vieron obligados a cerrar sus puertas y dejar de lado sus servicios por esta situación que vive la zona fronteriza.